Por: Jessica Datsko.
En el mes de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer. En Club 700 Hoy queremos unirnos a esta celebración desde una perspectiva diferente y relevante, que va más allá de festejar a la mujer solamente una vez al año.
Por eso, te invitamos a leer esta linda reflexión de Jessica Datsko.
Se ha dicho que las mujeres son la máxima creación de Dios, pero a la vez, hemos visto mucha desigualdad y tantas injusticias hacia las mujeres a través de los años. Ciertamente, estos temas son el enfoque frecuente del Mes Internacional de la Mujer.
Sin embargo, el Creador del universo, nuestro Padre Celestial, quiere que pongamos atención a lo que Él dice que es ser una mujer creada a Su imagen.
Un buen lugar para empezar es observando a la mujer de Proverbios 31:10-31, quien ha sido un ejemplo a través de los siglos en el mundo judeocristiano.
Estos versículos nos hablan de una mujer que cuida de sí misma, cuida su matrimonio y a sus hijos, y se ocupa de su hogar y su comunidad en diversas maneras. La mujer de Proverbios 31 era una excelente administradora de su tiempo y de sus recursos.
Pero ¿de dónde nace toda su fuerza y capacidad?
Al final del pasaje es donde encontramos la fuente de todo: «El encanto es engañoso, y la belleza no perdura, pero la mujer que teme al Señor será sumamente alabada». (Proverbios 31:30 NTV).
El temor de Dios —el honrarlo, respetarlo, amarlo reverentemente, y estimarlo por encima de todo como nuestro único Dios— ¡es la clave para el arte de ser mujer!Lo llamo un arte, por la creatividad y sabiduría que se requieren para manejar cada aspecto de nuestra vida.
¡Recuerda que fuimos creadas a la imagen de un Dios creativo! Solo en Él encontramos todo lo que necesitamos para alcanzar el ideal de ser una verdadera mujer.
Mi deseo para todas las mujeres que formamos parte de esta comunidad de Club 700 Hoy es que, más allá de ser mujeres, esposas y madres ejemplares, podamos ser como la mujer de Proverbios 31… o, como lo digo yo, que seamos artistas que rebosan del poder creativo de Dios en todas las áreas de nuestras vidas.
En Cristo,
P.D. Amiga, quiero invitarte a que alabes a tu Creador en el esplendor y la belleza de Su Santidad. Escóndete en Él y ahí encontrarás tu verdadero “yo”: ¡una obra de arte!
No caigas en el engaño que promete satisfacer tu necesidad de ser amada y respetada, pero en realidad te esclaviza al enojo y al círculo vicioso de pelear y nunca ganar.
Refúgiate en tu Creador, quien ya triunfó sobre el mal en este mundo, y te ha hecho justificada por medio de la sangre de Su Hijo: Cristo Jesús.