¿Crees que el tarot, la brujería, el ocultismo y otras prácticas espirituales son solo fantasía? ¿O quizás te intrigan y piensas que no tienen nada de malo? En este episodio de CASA ZOEN, Roberto profundiza en este fascinante tema junto a a la exbruja Julie López.
Julie creció inmersa en prácticas ocultistas que fueron transmitidas por generaciones en su familia, hasta llegar a ser una de las brujas más poderosas en su campo. Sin embargo, esta vida la condujo a través de un oscuro camino que pronto se convirtió en una pesadilla.
Esta valiente mujer nos comparte su increíble historia, llena de experiencias dignas de una película de terror. Pero, después de años de oscuridad, la luz conquistó las tinieblas.
Acompáñanos a descubrir cómo el poder de Dios la rescató, y por qué estas prácticas no son un simple juego.
Julie López lo vivió en carne propia: lo que al principio parecía poder, control y conexión espiritual, terminó siendo esclavitud disfrazada. “Pensé que tenía el control, pero en realidad era yo quien estaba siendo manipulada”, confiesa. Lo que se presenta como inofensivo —cartas, tarot, rituales, guías espirituales— a menudo esconde una realidad más oscura de lo que imaginamos.
“Porque el adversario anda al acecho como león rugiente, buscando a quién devorar.”
(1 Pedro 5:8, NBLA)
Lo más impactante no es solo lo que Julie vivió, sino cómo fue liberada. “El día que conocí al Espíritu Santo, sentí paz por primera vez en mi vida”, recuerda. “No fue una religión, fue una relación viva con el Dios que restaura”.
“Y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.”
(Juan 8:32, NBLA)
Este episodio puede hacerte cuestionar lo que piensas. Tal vez no sabías que detrás de prácticas aparentemente inocentes hay realidades que no se ven a simple vista. Pero también es una historia que da esperanza: nadie está demasiado lejos para ser rescatado.
“La luz brilla en las tinieblas.”
(Juan 1:5, NBLA)
Mira el episodio completo y descubre la verdad que el enemigo no quiere que sepas.
La libertad está más cerca de lo que crees.
